Four Ever {Capítulo 5}

Capítulo 5

Siwon

Logré pasar menos de veinticuatro horas sin ver al niño.

Bien, bien, más como doce horas.

Eso fue porque la mañana después de haber asistido a mi primera reunión de AA en más de tres meses, Heechul me había pedido que le llevara un poco de desayuno al niño ya que había llegado tarde al trabajo. Había estado en casa a la hora del almuerzo, pero para entonces me di cuenta de que el niño había comenzado a toser y, por alguna razón inexplicable, lo había estado revisando cada hora, incluso una vez que Heechul se había hecho cargo de las tareas de cuidado de niñera. Si Heechul había notado tanto mi renuencia a estar cerca del niño como mi incapacidad para mantenerme completamente alejado de él, no había dicho nada.

Eso fue porque no había dicho nada en absoluto.

Sí, Heechul y yo seguíamos hablando, pero no realmente hablando.

Sabía que lo lastimaría al no decirle antes de salir de la casa que sentía la necesidad de ir a una reunión de AA, pero ¿qué se suponía que debía hacer? ¿Decirle a Heechul que la presencia de nuestro huésped me estaba dando vueltas? ¿Que solo estar cerca del adolescente, probablemente, apenas legal, me hizo desear algo que solo había sentido con Heechul?

Sí, eso iría súper bien.

Y ahora el niño estaba legítimamente enfermo y estaba preocupado como la mierda, a pesar de las garantías de Heechul de que probablemente era solo la gripe. El plan había sido de que Heechul solo se pusiera a trabajar unas pocas horas, el tiempo suficiente para controlar al joven que había sido hospitalizado y dar seguimiento a otros pacientes. Me pidió que verificara la temperatura del niño y lo llamara si superaba cierto número, y aunque lógicamente sabía que el niño no estaba en ningún tipo de peligro, cada vez que salía de la habitación después de tomarle la temperatura, empece a preocuparme por haber perdido alguna señal de que estaba en grave peligro. 

Cuanto más me había resistido a verlo, más los recuerdos habían comenzado a asaltarme uno por uno y mis manos comenzaron a temblar con la necesidad de una bebida. Como una reunión de AA había estado fuera de discusión hasta que Heechul estuviese en casa, había hecho lo único que me había brindado algún alivio.

Había realizado una vigilia en la habitación del niño... y todavía estaba allí, incluso con Heechul de camino a casa.

El niño había estado dormido la mayor parte de la mañana, despertando solo el tiempo suficiente para que yo tomara su temperatura y le diera un medicamento para tratar de mantenerlo más cómodo. 

Afortunadamente, se había mudado a la cama en algún momento y Nana, como era de esperar, no se había apartado de su lado, aunque había hecho que el mini caballo se levantara de la cama un poco antes cuando el niño comenzó a moverse inquieto. Tan tranquila como estaba Nana, no era exactamente la mejor compañera de cama. La llevé afuera al granero para que pudiera comer con el otro ganado y tomar aire fresco, así que solo estábamos el niño y yo  en la habitación. Y Waldo, por supuesto.

Había evitado a propósito que Skittles y Blueberry entraran a la habitación, pero Waldo había comenzado a golpear su pico contra la puerta cerrada hasta que cedí y lo dejé entrar. Lo último que quería era que Waldo le hiciera más daño a su pico. El pájaro estaba hurgando actualmente en algunas de las plantas que estaban en el asiento de la ventana de la habitación.

Miré mi reloj para ver la hora. Heechul me había enviado un mensaje de texto diciendo que estaba de camino a casa. No estaba seguro de si aún sentiría la necesidad de ir a una reunión una vez que Heechul se hiciera cargo del cuidado del niño, pero si lo hiciera, tendría que levantarme y decirle a Heechul antes de salir de la casa, en lugar de esperar hasta después para enviarle un jodido mensaje de texto.

Mi consumo de alcohol fue otra de esas cosas de las que Heechul y yo no hablamos, y realmente no quería que eso cambiara. Había hecho suficiente daño a nuestra relación cuando mi necesidad de alcohol se había descontrolado un año antes. No quería cargar a Heechul con todos los demonios que todavía me atravesaban. Se suponía que íbamos a volver a la normalidad e incluso si fuera torpe como el infierno, no quería enturbiar las aguas con la mierda con la que ya debería haber podido lidiar.

Los gemidos del niño me distrajeron de mis pensamientos sobre Heechul, e inmediatamente me levanté de la silla y fui hasta la cama. El hombre más joven se agitaba inquieto, y pude ver un brillo de sudor en su frente.

¿Estaba teniendo una pesadilla corriente o su cuerpo estaba reaccionando a la enfermedad? ¿Qué pasaría si su temperatura hubiera subido en la última hora y no me hubiera dado cuenta?

Sentí el temblor revelador en mis dedos cuando la ansiedad hizo que mi barriga se retorciera y se volviera incómoda.

El maullido del niño se hizo más fuerte y sus extremidades comenzaron a sacudirse un poco más.

"Hey”, dije mientras alcanzaba el termómetro. Era uno que solo tenía que pasar por la frente del niño, pero con la forma en que se movía, sabía que no podría obtener una lectura. Una mirada al reloj de cabecera mostró que Heechul estaba al menos unos minutos de llegar. Me dije que debía dejar al niño hasta que Heechul llegara a casa, pero cuanto más se revolvía, más comenzaba yo a entrar en pánico.

"Hey, chico", llamé, alzando la voz con la esperanza de que lo sacara de su sueño.

Por favor, Dios, deja que duerma.

"Hey", repetí, luego puse mi mano sobre su brazo para poder tocar su frente y ver qué tan caliente estaba.

Antes de que pudiera hacer contacto con su piel, dejó escapar un chillido penetrante y se apartó de mí. Su espalda se estrelló contra la cabecera y luego prácticamente se cayó de la cama en su prisa por escapar. Sus ojos eran tan grandes como platillos. Todavía llevaba la bata del hospital que Heechul le había traído a casa, aunque ahora estaba húmedo de sudor.

Levanté los brazos cuando el niño trepó por el suelo para llegar a la esquina en la que había estado por primera vez. Sus brazos se protegieron la cara mientras intentaba meterse en una pelota lo más pequeña posible. Mi corazón se estrelló en mi pecho por el movimiento defensivo.

"Hey, está bien, soy solo yo, Siwon. ¿Recuerda? ¿Soy amigo de Heechul? "

Ni siquiera estaba seguro de cuán consciente era el niño y si recordaba a Heechul ... o a mí. Parecía demasiado cansado para pelear conmigo antes cuando le traje el medicamento y algo de beber.

Definitivamente no estaba cansado ahora.

Lentamente di la vuelta a la cama. Podía escuchar a Waldo chillar detrás de mí, claramente molesto por la perturbación. Pero mis ojos eran solo para el niño aterrorizado. Mantuve mis movimientos lentos y fáciles mientras me arrodillaba frente al joven. 

“Solo quiero asegurarme de que te sientas bien", dije en voz baja. "Te has estado sintiendo un poco mal”.

Mis palabras parecían no tener ningún efecto sobre él. De hecho, su respiración empeoró y estaba llorando histéricamente.

Joder, necesitaba tranquilizarlo. Por un lado, pensé en que salir de la habitación podría ayudar a calmar su terror, pero por el otro, tenía miedo de lo que sucedería si él experimentara algún tipo de emergencia mientras yo no estuviera presente. ¿Qué pasaría si su respiración agitada fuera el resultado de su enfermedad y no el ataque de pánico que sospechaba?

"¿Puedes intentar ralentizar tu respiración por mí un poco?" Yo pregunté. Me aseguré de no acercarme más a él.

Me ignoró y comenzó a arañar la pared.

"Joder", susurré mientras sacaba mi teléfono de mi bolsillo y marcaba el número de Heechul.

"Amigo, ¿tienes antecedentes de asma?" Le pregunté al niño mientras lo veía tratando de arrastrar enormes bocanadas de aire.

Estaba a punto de colgar en Heechul para poder marcar el 911 cuando respondió.

"Heechul, hay algo mal con el niño", le dije. Mi voz era tranquila porque así fue como me habían entrenado para reaccionar ante situaciones como esta, pero por dentro estaba luchando por mantener el control.

¿Qué pasa si el chico muere antes de que llegara la ayuda?

La voz de Heechul era uniforme y tranquila, así como dijo: "Dime qué le está pasando, Siwon. ¿Cuáles son sus síntomas?”

Estaba tan atrapado al describir el comportamiento del niño que no noté a Waldo hasta que me había pasado y estaba a solo un pie del niño. Cuando hice un movimiento  para agarrar al pájaro para que no empeorara la situación, el joven se quejó. Para mi sorpresa, Waldo picoteó el dorso de mi mano en lugar de tratar de escapar de mi alcance. El pájaro retrocedió varios pasos hasta casi tocar al niño. Podía escuchar a los perros ladrar afuera de la puerta, presumiblemente debido a todo el ruido que podían escuchar desde el interior de la habitación.

“¿Qué carajo? ¡Alejate de el!"

No tenía idea de quién había dicho esas palabras, pero fue un pandemonio puro después de eso. Alguien me agarró por detrás y, por la forma en que estaba agachado en el suelo, no pude recuperar mi propio peso a tiempo para evitar golpear el suelo. 

“¡No lo toques!" gritó la misma voz, luego un golpe me atrapó en la mandíbula.

Desconecté todo lo demás cuando comenzó mi entrenamiento. El peso encima de mí fue lo suficientemente fácil de desalojar y en un movimiento rápido, yo era el que estaba arriba. Pero el tipo que me había abordado no iba a caer sin luchar y utilizó todas las armas de su arsenal para atacarme. Piernas, manos, palabras ... todas me fueron arrojadas a la vez.

Usé mi peso más pesado para sujetar al tipo al piso y luego apoyé mi antebrazo en su garganta y apliqué presión. Como era de esperar, la falta de oxígeno lo hizo concentrarse rápidamente en tratar de quitarle solo el brazo del cuello en lugar de atacarme con todo su cuerpo. Cogí una de sus manos con la mía libre y la clavé al suelo.

Era apenas consciente de que los perros ladraban, los pájaros chillaban, el niño sollozaba y Heechul gritaba, pero dejé escapar todo eso mientras me enfocaba en mi asaltante. De ninguna manera lo estaba dejando cerca de Heechul o el niño.

De ninguna manera.

El chico debajo de mí comenzó a ponerse azul. "Deja de luchar, gilipollas", murmuré. Mi objetivo no era matarlo ... solo hacer que se desmayara. Pero el chico todavía estaba luchando contra mí.

"N... no ... no ..." jadeó. "To... toq... ques...”, logró salir.

“¡Siwon, déjalo ir! ¡Lo traje aquí!”

Las palabras de Heechul se registraron en algún lugar en el fondo de mi mente y finalmente comencé a notar al joven que yacía debajo de mí. Sus ojos, que habían estado brillantes de furia cuando me atacó por primera vez, parecían asustados, pero noté que no me estaba mirando.

Estaba mirando en dirección al niño.

Así que el chico no tenía miedo de lo que le podría pasar, a pesar de que realmente debería estarlo. No, estaba aterrorizado por el niño que Heechul estaba tratando de calmarse.

Aflojé un poco mi control sobre el hombre debajo de mí. "¿Quién eres tú?" Le pregunté mientras observaba su rostro magullado y la ropa sucia que llevaba puesta. Olía horrible y si todavía no hubiera estado preocupado por Heechul y la seguridad del niño, lo habría liberado solo por el hedor.

Varios de los perros estaban paseando nerviosamente por la habitación y pude escuchar a Waldo gritando una tormenta detrás de mí. Eché un vistazo por encima del hombro para ver que el tucán picoteaba violentamente la pierna de Heechul mientras Heechul  hablaba suavemente al niño en la esquina. Tenía las manos en la cara del niño.

"Respira y sostenlo", instruyó Heechul. El niño estaba colgado de las muñecas de Heechul y sacudía la cabeza.

"¡Déjame levantarme!" gritó el chico debajo de mí. "¡Él me necesita!"

Lo miré y vi que todavía tenía esa mirada de terror absoluto en sus ojos. Aflojé mi agarre sobre él.

"¿Heechul ?" Pregunté.

"Hazlo", respondió Heechul, sin levantar la voz ni un poco. Estaba centrado únicamente en el niño.

Solté al hombre debajo de mí y me bajé de él. Él pasó a mi lado.

"Donghae, estoy aquí", dijo el chico suavemente mientras tomaba el lugar de Heechul. Juré que escuché al niño, Donghae, aparentemente, dejar escapar otro gemido. "Solo concéntrate en mí, Donghae", dijo el chico. "Solo somos tú y yo, ¿verdad?"

Pasaron varios latidos antes de que Donghae lograra asentir. Se aferraba a las muñecas del tipo como si hubiera sido de Heechul, pero algo del miedo había disminuido y lo vi contener el aliento. El chico comenzó a contar hacia atrás desde el diez. Cuando llegó a uno, Donghae dejó escapar el aliento.

"Bien, de nuevo", susurró el chico alentador. Casi podía sentir a Donghae disfrutando de su aprobación.

Heechul retrocedió unos pasos de la pareja. Waldo se había calmado considerablemente y observaba la interacción entre los dos hombres más jóvenes. Realmente no podía culpar al pájaro porque me encontré hipnotizado por la sintonía en que parecían estar los dos jóvenes.

"¿Estás bien?" Escuché a Heechul preguntar, y luego sentí su mano cerrándose sobre la mía. Pensé que en realidad estaba tomando mi mano para sostenerla, pero en su lugar, comenzó a examinar la parte posterior de la misma, donde había una pequeña herida punzante que manaba sangre. Apenas pude ocultar mi decepción.

Lo cual no tenía sentido.

¿Por qué demonios estaba decepcionado de que mi pareja solo estaba haciendo su trabajo?

Asenti. "Waldo me raspó", le dije. "¿Él también te raspó?" Pregunté mientras miraba la pierna de Heechul. Afortunadamente, no vi sangre goteando a través de sus pantalones de enfermero.

“No, la tela ayudo. No pienses que se rompió la piel en absoluto. Pájaro loco ”, respondió Heechul, aunque no había ira real en su voz.

"Lo estaba defendiendo", le dije.

"¿Qué?" Preguntó Heechul mientras me miraba sorprendido.

"El niño-"

"Donghae", ofreció Heechul.

“Bien, Donghae. Donghae estaba molesto y cometí el error de alcanzar a Waldo. Creo que pensó que iba a agarrar a Donghae ... "El nombre sonaba extraño en mi lengua, pero cuando miré a Donghae, mi cerebro rápidamente se ajustó a tener un nombre que combinara con el hermoso rostro del chico. Mi mirada se dirigió al otro hombre que parecía ser un par de años mayor que Donghae. Su cara estaba bastante golpeada y pude ver que sus nudillos también estaban magullados. Recordé la historia que Heechul me había contado sobre el amigo de Donghae que había ingresado en el hospital después de haber sido brutalmente golpeado.

"¿Su amigo?" Yo pregunté. 

Como si sintiera mis ojos en ellos, el mayor de los dos me miró. Su evidente desafío y hostilidad me hicieron algo extraño que no pude identificar. Aunque seguía hablando en voz baja con Donghae, cuya respiración comenzaba a equilibrarse, los ojos del chico me enviaron un mensaje muy claro.

"HyukJae ", dijo Heechul suavemente. "Son hermanos".

Eso explicaba la prisa de HyukJae por atacarme. Había asumido que estaba lastimando a su hermano y había entrado en la habitación de aquella forma. Pero cuanto más miraba a la pareja de hermanos, más me parecía que algo no encajaba.

No está mal, solo que había algo... fuera.

Me contuve la lengua cuando Heechul se movió cerca de los jóvenes. Donghae se empujó automáticamente contra HyukJae, quien lo tomó protectoramente en sus brazos. Los intensos ojos azules de HyukJae siguieron cada movimiento de Heechul y automáticamente me encontré acercándome a Heechul en respuesta.

"Está bien, Siwon", dijo Heechul con calma, sus ojos en HyukJae . "HyukJae y yo ya hemos hablado un poco sobre cómo no tiene nada que temer de nosotros".

Cuando dijo "hablar", HyukJae se encogió un poco, y luego se sonrojó.

¿Que demonios?

Una mirada extraña pasó entre los dos hombres y luego Heechul me miró por encima del hombro. Me guiñó un ojo como solía hacerlo cuando quería decirme que todo estaba bien.

No había visto ese guiño en mucho tiempo.

Su impacto fue devastador. La aguda sensación de pérdida que sentí casi me hizo arrodillar. Algo debe haberse mostrado en mi expresión porque la sonrisa de Heechul se desvaneció y bajó los ojos. Volvió su atención a HyukJae, que todavía sostenía a Donghae en sus brazos. Waldo había tomado un puesto en la pierna de Donghae. Si no hubiera estado tan preocupado con todo lo que estaba pasando, habría estado muy orgulloso de mi pequeño pájaro guerrero.

“Donghae, sé que todo esto da miedo, pero realmente necesito controlar tu temperatura y escuchar tus pulmones. ¿Me dejarás hacer eso? HyukJae se quedará aquí contigo todo el tiempo, ¿de acuerdo?”

Mi preocupación por Donghae regresó cuando noté que aunque respiraba normalmente de nuevo, todavía se veía muy sonrojado y sudoroso.

HyukJae levantó su mano hacia la frente de Donghae. No es sorprendente que Donghae no resistiera el contacto. Sus brazos estaban apretados alrededor de su hermano, pero él estaba mirando a Heechul. Cuando sus ojos verdes se movieron hacia mí, me encontré tratando de sonreír y asentir como si de alguna manera pudiera alentarlo.

¿A quién diablos estaba bromeando?

Hace treinta segundos lo había asustado tanto que se había arrojado de la cama para alejarse de mí.

HyukJae frunció el ceño cuando sintió la frente de Donghae, luego bajó la boca al oído de su hermano y le susurró algo. Me estremecí porque todo el asunto era extrañamente íntimo y, en lugar de extrañarme, hizo algo completamente distinto.

Lo que sea que HyukJae le dijo a Donghae hizo que el hombre más joven sacudiera la cabeza y apretara más contra HyukJae. Pude ver la mano de HyukJae subiendo y bajando por la espalda de Donghae. Periódicamente se desviaría a la parte posterior del cuello de Donghae. Me quedé tan atrapado al ver los largos y fuertes dedos de HyukJae acariciando ese lugar donde el cabello de Donghae se unía con su piel que no escuché a Heechul al principio.

"Cariño, está detrás de ti".

"¿Qué?" Prácticamente croé. Los ojos de HyukJae estaban sobre mí y parecía que estaban viendo algo que no debería estar viendo.

"Mi bolsa. Está detrás de ti ", dijo Heechul mientras asentía a un lugar justo detrás de mí. Me giré para mirar y finalmente noté que varios de los perros estaban en la habitación con nosotros, pero se habían caído al suelo como si sintieran la tensión y no quisieran contribuir. Skittles y Blueberry estaban parados cerca de Bentley. Finalmente me di cuenta de que la bolsa médica de Heechul yacía en las patas delanteras de Bentley, como si la hubiera estado protegiendo o algo así.

"Bien", dije tontamente mientras me apresuraba a agarrar la bolsa. No me molesté en sacar a los animales de la habitación porque todos mantenían su distancia de los dos jóvenes en la esquina.

Le entregué la bolsa a Heechul, luego retrocedí unos pasos de ellos tres cuando HyukJae me miró en advertencia silenciosa. Me preguntaba si era porque él creía que había lastimado a su hermano o si era porque estaba viendo algo en mi reacción a todo este desastre que no debería haber estado allí en primer lugar.

"Donghae, solo voy a revisar tu temperatura, ¿de acuerdo? Solo necesito que inclines un poco tu cabeza hacia atrás para poder pasar esto por tu frente”.

"No es estúpido", espetó HyukJae. "No necesitas hablarle como si fuera un niño. ¡Él no habla pero te entiende muy bien! "

El estallido de HyukJae me puso rígido, pero Heechul solo dudó un momento antes de decir:" No estoy hablando con él como si fuera un niño, HyukJae. Estoy hablando con él como si fuera alguien que no se siente bien en este momento y no está seguro de lo que está sucediendo a su alrededor. Me gusta explicar a todos mis pacientes lo que estoy haciendo y por qué ".

La paciencia de Heechul era envidiable porque era todo lo que podía hacer para no decirle a HyukJae que mostrara un jodido respeto.

Por su parte, Heechul continuó con su examen como si HyukJae no hubiera dicho nada en absoluto. "Tu temperatura es un poco más alta de lo que era esta mañana, Donghae, pero tus pulmones suenan claros, así que eso es bueno. Diría que definitivamente tienes gripe, así que pasarás los próximos días en la cama bebiendo muchos líquidos y descansando mucho, ¿de acuerdo?”, Heechul miró a Donghae mientras hablaba, pero luego sus ojos se dirigieron a HyukJae y juré que vi pasar algo entre ellos nuevamente.

Jesús, ¿qué estaba pasando conmigo?

"HyukJae, ¿puedes ayudarme a llevarlo de vuelta a la cama?"

Cuando Heechul fue a alcanzar uno de los brazos de Donghae, HyukJae fue quien disparó su mano para detenerlo. 

"No lo toques. Lo haré ", gruño.

"Hey", espeté mientras daba un paso adelante, pero luego Heechul estaba en mi espacio y poniendo sus manos en mis brazos para detenerme.

"Está bien, Siwon", dijo suavemente. "Démosles unos minutos".

El cuerpo de Heechul apretado tan cerca del mío me ayudó a calmar mi ira ante la falta de respeto de HyukJae. Respiré hondo y percibí el aroma familiar de Heechul. Me dolía el corazón mientras luchaba contra el impulso de rodearlo con mis brazos y aguantar de por vida. Quería hacer lo que HyukJae había estado haciendo. Quería dar y recibir ese consuelo que Heechul y yo solo nos habíamos traído el uno al otro.

Pero Heechul se alejó de mí y agarró su bolso, luego comenzó a sacar a todos los animales en silencio de la habitación. Excepto Waldo.

El tucán parecía feliz justo donde estaba ... al lado de Donghae. El pájaro estaba frotando su pico en la parte externa del muslo del niño.

Yo estaba extrañamente celoso.

El problema era que no estaba exactamente seguro de quién estaba celoso ... del pájaro ... o del niño.

De acuerdo, sí, lo sabía.

¿Y no era ese un verdadero problema?

Capitulo 6